Como no había equivalencias, no hubo pelea. La gran promesa del boxeo argentino Mirco Cuello noqueó en el 1° round al ignoto brasileño Michel Da Silva, el sábado, en una nueva Fecha FAB que tuvo lugar en el Casino de Buenos Aires.
El santafesino respondió tal lo esperado a sus enormes pergaminos y el paulista hizo lo propio de acuerdo a lo que dictaba su foja de servicios.
Cuello (9-0, 8 KO), con su precisión, potencia y técnica depurada, conectó todo lo que lanzó y no le llegaron los escasos envíos de Da Silva (13-1, 12 KO).
Con un gancho a la zona hepática fulminante, el argentino mandó a la lona al visitante, quien no se pudo recuperar. Para lograr continuidad y sumar el título sudamericano pluma que estaba vacante, para eso le sirvió esta pelea a Cuello y nada más.
Porque enfrente tuvo un rival que venía de una inactividad de cuatro años y que, como casi siempre sucede con los boxeadores brasileños que llegan al país, su único pergamino era un récord incomprobable e inflado a base de oponentes de récord negativo.
