Revivió a los 36 años. Después de ocho derrotas en el exterior, logró su primera victoria fuera de casa. Y por nocaut. Y ante un invicto. Y en Inglaterra. Ezequiel Maderna noqueó el sábado en el 5° round al británico Karol Itauma y, ya en el inicio del 2023, logró la que será una de las victorias más resonantes del boxeo argentino en el año.
La clave del combate apareció en el primer round. “El Olímpico” (29-10, 19 KO) conectó sendos rectos de derecha en esos primeros minutos, y fueron los envíos más claros de una vuelta en la que Itauma (9-1, 7 KO) intentaba, pero con mucha menos profundidad: antes de aterrizar en la humanidad del platense, sus manos se esfumaban en el aire.
En el 2°, las acciones parecieron cambiar de forma drástica. Porque después de un envío y devolución de gentilezas de cross de izquierdas, el púgil nacido en Eslovaquia filtró un cruzado de derecha y le hizo apoyar el guante en la lona al argentino, acción que debió haber merecido una cuenta por parte del árbitro inglés John Latham.
Transcurridas esas alternativas, Itauma entendió que su negocio estaba en la corta distancia. Inteligente, llevó a Maderna a ese duelo de fricción y roce que siempre le resulta incómodo.
Pero, en el 4°, fue el pupilo de Rubén Paniagua quien dictó dónde se iba a seguir peleando. Fue entonces que apeló a sus golpes rectos, retomando la disputa en la larga.
Luego de capitalizar ese parcial, Maderna lo fue a buscar en el 5° y, con un recto de derecha idéntico a los que había lanzado durante toda la noche, derribó para siempre al púgil local.
Uno había perdido cuatro de las últimas cinco. El otro había vencido todas las veces en que se había subido a un ring. No solo no había perdido: jamás había sido enviado a la lona. Hasta que aquel de presente irregular avisó que en el boxeo siempre hay lugar para la esperanza, y conmovió el Wembley Stadium.
