En menos de dos meses, Gabriel Omar Díaz “se cargó” dos invictos. El del cordobés Kevin Brizuela, a fines de abril –con un KOT9° demoledor-, y el del estadounidense Robert Daniels Jr, el último viernes, en el Casino Buenos Aires.
“El Loco” (14-5, 6 KO) volvió a imponer su pegada y su buena asimilación al castigo, y defendió el título Fedelatin AMB mediopesado que había conseguido frente a Brizuela.
El norteamericano arrancó la pelea como comenzó todos los asaltos: yendo hacia adelante, tomando el centro del ring y lanzando su zurda a fondo. Pero, ya en la primera vuelta, el santafesino avisó de lo que era capaz. Con un derechazo que agarró mal parado al visitante, lo derribó.
En el 2°, Daniels intentó borrar la imagen del parcial anterior. Sin embargo, Díaz supo esperar su momento y, cuando pasó la mitad del round, fue él quien comenzó a atacar y, tras conmocionar a su oponente, lo obligó a una cuenta de protección. Luego, casi lo derribó en dos oportunidades, pero intervino la campana.
Tras un tercer asalto disputado, en el 4° Díaz insistió con su fórmula de cocinar las victorias a fuego lento. Permitió que lanzaran, bloqueó, bancó embistes, y luego pegó él. El argentino estuvo a punto de alcanzar la definición y su rival se fue al descanso absolutamente conmovio.
Apenas arrancó el 5°, con una seguidilla de por lo menos seis manos, Díaz tumbó a Daniels y, aunque este se levantó, su esquina se apiadó y arrojó la toalla.
A los 25 años, Díaz dejó en claro que es un sólido peleador y un “cuco” para cualquier joven mediopesado o mediano.
